En una movida estratégica que marca un cambio significativo en su enfoque comercial, YPF anunció la venta de su participación en MetroGAS, la principal distribuidora de gas en Argentina. Durante una exposición en el Consejo Interamericano de Comercio y Producción, el presidente de la empresa, Horacio Marín, destacó que la decisión responde a un interés renovado en concentrar recursos en el sector petrolero, específicamente en la exploración, producción y comercialización de petróleo, que constituyen el núcleo de su actividad.
YPF, que actualmente posee el 70% de MetroGAS a través de Gas Argentina S.A. (GASA), controla así la mayor distribuidora de gas natural del país, abasteciendo a más de dos millones de clientes en el área metropolitana de Buenos Aires. Sin embargo, esta relación ha estado bajo el escrutinio debido a las políticas públicas que buscan evitar la integración vertical en el sector energético. Desde 2017, el gobierno nacional había sugerido a YPF que considerara alternativas para desinvertir en MetroGAS, dado que la legislación prohíbe a una sola empresa controlar múltiples etapas de la cadena de valor del gas.
Los factores que impulsan esta desinversión son variados, pero uno de los más destacados es la necesidad de ajustarse a normativas que regulan la concentración de actividades en el sector energético. Estas regulaciones están diseñadas para fomentar la competencia y prevenir monopolios, lo que ha obligado a YPF a evaluar su posición en el mercado gasífero. A medida que la empresa busca cumplir con estas exigencias, la venta de su participación en MetroGAS se presenta como una solución viable.
Además de la presión normativa, YPF está enfocándose en el desarrollo de Vaca Muerta, una de las reservas de shale más grandes del mundo. Este yacimiento se convirtió en un eje clave para la empresa, que busca maximizar su producción de hidrocarburos no convencionales.