La provincia de Buenos Aires está bajo alerta meteorológica naranja debido a la formación de un ciclón extratropical, caracterizado por fuertes vientos y abundantes precipitaciones. Este fenómeno, resultado de una ciclogénesis —proceso de formación y desarrollo de un sistema de baja presión—, impactará principalmente la región de la Costa Atlántica.
Se prevén ráfagas de viento de hasta 90 km/h y acumulaciones de lluvia que podrían llegar a los 50 milímetros en las ciudades costeras. Además, se espera un descenso significativo de la temperatura, con una mínima de 7 grados registrada el jueves por la mañana. El frío, persistente desde el miércoles, se ve intensificado por los chaparrones y los vientos fuertes.
Para el resto del jueves, hay un 100% de probabilidad de lluvia, con chaparrones que se prolongarán hasta la noche, reduciéndose a un 70% de probabilidad. Según informes de Meteored, “los efectos de la formación del centro de baja presión sobre la provincia de Buenos Aires continúan, con vientos muy intensos del sector sur sobre toda la franja central del país”. Se anticipa que el descenso de la temperatura se intensificará en los próximos días, especialmente el viernes, aumentando la sensación térmica de frío en la región.
QUÉ ES UN CICLÓN EXTRATROPICAL
Los ciclones extratropicales, también conocidos como ciclones de latitud media, son sistemas meteorológicos de baja presión que se encuentran en las latitudes medias de la Tierra. A diferencia de los ciclones tropicales y polares, estos ciclones no presentan las características típicas de esos fenómenos. Se asocian principalmente con frentes, gradientes térmicos horizontales y puntos de rocío, también conocidos como "zonas baroclinas".
Estos ciclones son fenómenos meteorológicos comunes que, junto con los anticiclones, influyen en el tiempo en muchas partes del mundo, generando nubosidad y tormentas. Se desarrollan en regiones templadas, ubicadas entre el trópico y los polos, y son a veces llamados ciclones templados.
En el hemisferio norte, un ciclón extratropical rota en sentido contrario a las agujas del reloj, mientras que en el hemisferio sur lo hace en el sentido de las agujas del reloj, debido al efecto Coriolis. Estos ciclones dependen de procesos baroclínicos, como el contraste de temperatura entre masas de aire frío y cálido.
Cuando los ciclones extratropicales muestran una disminución rápida y significativa en la presión atmosférica, este fenómeno puede ser conocido como
"ciclogénesis explosiva".
