Cuando todavía no pasó una semana de la aprobación de la ley Bases en el Congreso, el Gobierno comienza a moverse para intentar contener a algunos sectores a los que Javier Milei agrede permanentemente pero a quienes su administración necesita de su lado y que expresan algunos cuestionamientos respecto de la nueva normativa.
Uno de ellos es la
Unión Industrial Argentina (UIA), que
recibe este martes a funcionarios del Ministerio de Economía para empezar a discutir cómo será la implementación del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) particularmente en ciertos aspectos técnicos pero fundamentalmente por su impacto en las Pymes.
El impacto de los beneficios a las grandes empresas que promueve el RIGI fue uno de los puntos que más controversia generó durante el debate del proyecto oficialista.
Según NA, aunque la reunión tendrá como eje central el RIGI, a la UIA llegó la "inquietud" manifestada por los sectores vinculados a las pequeñas y medianas empresas en relación a la disparidad en la competencia. Por eso,
la dirigencia empresaria también tratará la propuesta de una ley Pyme.
Además, incluirán en el intercambio temas vinculados a la logística del sector y medidas para reactivar el mercado interno, en medio de la caída de la demanda a causa de la recesión, que sigue profundizando su impacto pese a los tuits del Presidente.
Los enviados de la gestión de Milei al encuentro son los secretarios de Comercio, Pablo Lavigne, y de Planeamiento y Gestión para el Desarrollo Productivo y de la Bioeconomía, Juan Pazo.
Desde la UIA, Daniel Funes de Rioja, su titular, recordó ante el mismo medio que la organización que encabeza está a favor de la primera ley de la administración libertaria pero puso reparos sobre los efectos del RIGI en las Pymes.
Dijo que en materia de insumos "se genera una asimetría" con los productores locales en materia de insumos y aseguró que al trasladar la posición de la entidad a los distintos partidos en medio del debate de la ley, consideraron que "hay muchas inversiones que abarcan a todo el universo pyme y que pueden tener resultados muy efectivos a la hora de estimular la producción, y el empleo formal".
Las diferentes organizaciones empresarias y gremiales habían expresado su descontento en las últimas semanas sobre el impacto del RIGI en las pymes, denunciando que quedaron en desventaja en las condiciones para competir.
El presidente de la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (APYME), Julián Moreno, advirtió que están "muy preocupados" porque el RIGI "desprotege a las industrias nacionales, en particular a las pymes, que no podrán competir con los grandes inversores extranjeros", mientras que desde Industriales Pymes Argentinos (IPA) elaboraron un informe para exponer las desventajas entre las pymes y las empresas beneficiadas por la ley, asegurando que "el RIGI prácticamente plantea un paquete de barreras para el funcionamiento de las MiPyMEs, es decir, para las empresas que predominan en la estructura productiva Argentina".
