En una sesión histórica y con la presencia del ministro de Economía y candidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa, presente en el recinto al momento de la votación, la Cámara de Diputados aprobó este martes por la noche y envió al Senado el proyecto de ley de reforma del Impuesto a las Ganancias elaborado por el Poder Ejecutivo, que lo elimina para todos los trabajadores/.
La media sanción se obtuvo con el respaldo de
135 legisladores del Frente de Todos, bloques provinciales, la Izquierda y los libertarios, entre otros, y 103 votos en contra, en su mayoría de Juntos por el Cambio, que entró una compleja contradicción discursiva.
Ahora, la iniciativa deberá pasar al Senado. En el cierre del encuentro, Massa se hizo presente en el recinto junto al triunvirato que conduce la CGT, que se movilizó en las calles alrededor del Congreso:
Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos Acuña.
La iniciativa obtuvo el apoyo del Frente de Todos, bloques provinciales, los liberales y la izquierda y contó con la oposición de Juntos por el Cambio.
La sesión especial comenzó pasado el mediodía, luego de que diputados de partidos provinciales y de la izquierda le proporcionaran las bancas necesarias al FDT, actualmente Unión por la Patria, para que llegue al quórum, que JXC buscó evitar.
Carlos Heller, como miembro informante del proyecto oficialista, fue el primero en hacer uso de la palabra. En primer lugar, detalló que la reforma significa “una mejora del poder adquisitivo del 21%” y, además, aseguró que “se trata de una herramienta altamente progresiva y dinamizadora del mercado interno”.
Por otro lado, desestimó las críticas que hizo la oposición durante las últimas semanas relacionadas con la intencionalidad electoral del proyecto. “Hemos escuchado que esta era una medida electoralista. ¿Qué quiere decir? ¿Que es buena para la gente? Enhorabuena”, dijo, y recordó que en Argentina hay elecciones cada dos años, por lo que “bajo esa óptica casi todas las medidas serían electoralistas”.
En la bancada que conduce Germán Martínez argumentaron que no existían razones para que la oposición rechace la suba del mínimo no imponible a $1.770.000 pesos (cerca de 700 mil trabajadores dejarían de pagar el gravamen) ya que es una de la políticas que figura en su plataforma electoral y ha sido una promesa de campaña en 2015.
Sin embargo, desde JXC insistieron en que la medida tendrá un impacto fiscal de $1 billón, que no será compensado con una reducción del déficit, omitiendo que no es la única forma de absorver la baja de recaudación, como precisó en más de una oportunidad Massa.
“Si no es compensada con una reducción del gasto público, después terminan emitiendo dinero y entonces lo que se da con una mano, se lo sacan con la otra mano a través de la inflación”, explicó Alejandro Cacace, del bloque Evolución.
Curiosamente, la plataforma electoral de JXC propone sacar el primer día casi todas las retenciones, cuyo volumen de recaudación es ampliamente superior a los que llegan por Ganancias al Estado, sin precisar cómo se compensaría.
A su turno, el diputado libertario y candidato presidencial Javier Milei consideró que el impuesto a las ganancias le "parece aberrante" porque "no permite la asignación de recursos eficientemente sino que además penaliza la acumulación de capital, que se termina manifestando en menos puestos de trabajo, menos productividad y menores salarios".
"Es un delirio descomunal tratar al salario como ganancia", añadió quien fue el aspirante presidencial más votado en las PASO, antes de anticipar que su sector votaría a favor de la inciativa oficialista.
Posteriormente, tomó la palabra Miriam Bregman (Frente de Izquierda), quien criticó a Juntos por el Cambio: "En muy poco tiempo los vimos cambiar de posición varias veces. [...] ¿Con quién va a conectar negándose a quitar un impuesto odiado por la clase trabajadora como es el impuesto a las Ganancias?". "Siempre sostuvimos que el salario no es ganancia y que hay que meterse con los ricos. Al revés que Javier Milei, nosotros creemos que hay que meterse con los banqueros, las cerealeras y los que vienen levantando en pala", apuntó.
El proyecto de ley de modificaciones en el impuesto a las ganancias implica la eliminación de la cuarta categoría, para que solo lo abonen en caso de aprobarse quienes obtengan ingresos mensuales superiores al nuevo piso del tributo, fijado en $1.770.000. Es decir, gerentes de empresas y sectores de altísimos ingresos.