El Senado de la Nación convirtió en ley este jueves un proyecto que prorroga por 50 años las asignaciones específicas destinadas al sostenimiento de actividades culturales como las bibliotecas populares, el cine, la música y el teatro.
La iniciativa fue aprobada por 57 votos afirmativos, dos negativos y nueve abstenciones. El Frente de Todos y un sector del radicalismo votaron a favor, en tanto que los negativos fueron los cordobeses del PRO Luis Juez y Carmen Álvarez Rivero, mientras que el resto del bloque macrista presente en el recinto se abstuvo.
El debate se llevó a cabo con la presencia del ministro de Cultura, Tristán Bauer, y de referentes de la cultura argentina que se ubicaron en los palcos del segundo piso del hemiciclo del Senado.
La presidenta de la Comisión de Educación, la oficialista sanjuanina Cristina López Valverde, abrió el debate diciendo que "
la cultura es una dimensión vital de la democracia". "Debemos trabajar en aras de la democratización de la cultura y de una cultura democrática", aseguró.
Por su parte, el radical porteño Martín Lousteau, argumentó que "nadie es dueño de la cultura" y resaltó el movimiento económico que genera el arte. "La cultura es 2,38 puntos del PBI, el 1,8% del total del empleo en la Argentina. Solo los servicios audiovisuales son el 0,4% del PBI", enumeró.
En cambio, la representante de PRO por Córdoba, Carmen Álvarez Rivero, dijo "sí a la cultura, no a la irresponsabilidad presupuestaria" porque, según calificó, "las asignaciones específicas serán nuevamente un zarpazo del Ejecutivo nacional sobre los fondos coparticipables".
"Como representante de Córdoba, mi provincia no puede ceder ni un centavo más. Los cordobeses estamos hartos de que nos pasen por encima", sentenció.
La oficialista mendocina Anabel Fernández Sagasti aseguró que
"desde diferentes bancadas pedimos el compromiso del Ejecutivo Nacional para que se comprometa a que en la reglamentación haya un piso del 30% de los recursos para que sea distribuido entre las provincias". "Esto será así, hasta tanto nosotros saquemos la nueva ley que estamos trabajando entre todos", precisó.
La ley fue sancionada originalmente en diciembre de 2017, en el marco de la reforma tributaria impulsada por el Gobierno de Mauricio Macri, que estableció un límite temporal a las asignaciones específicas destinadas a cultura y comunicación.
El límite, si no era prorrogado por el Congreso, se vencía el 31 de diciembre de este año. Si la norma no era sancionada, los recursos dejarían de ser de "asignación específica" y volverían a ser recaudados por el Tesoro Nacional como cuentas generales.