El Gobierno nacional pone primera hoy en su programa para controlar los precios de la carne con diálogo y sin medidas de mayor intervención estatal, siempre y cuando los sectores involucrados cumplan su parte:
el presidente Alberto Fernández anuncia este mediodía un Plan Ganadero y un nuevo esquema para la exportación de carne vacuna, que tiene como objetivo incrementar la producción a unas 5 millones de toneladas anuales y asegurar así el suministro a nivel doméstico con precios razonables.
La iniciativa será presentada, según está anunciado, desde las 12.30 en Casa de Gobierno. El propio jefe de Estado encabezará la reunión a la que se convocó al Consejo Agroindustrial Argentino y a todas sus organizaciones.
El dato más llamativo, pese al
rechazo que habían adelantado algunos sectores tal como conoció Política Argentina el viernes, es que según Perfil estarán presentes hoy todos los sectores: asistirían la Mesa Nacional de Carnes; el Consorcio Exportadores de Carne ABC; la Sociedad Rural; el IPCVA; CRA; Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne; la Cámara Argentina de Feedlot; Coninagro y Federación Agraria.
El Plan Ganadero, que en particular es la solución a largo plazo que busca el Gobierno, propone
aumentar de las 3 millones de toneladas actuales a 5 millones la producción de carne vacuna y reservar algunos cortes exclusivamente para el mercado interno, a precios por supuesto desanclados de la especulación comparativa con la exportación. Así se daría por finalizada en los plazos previstos la suspensión de la salida de la producción por 30 días dispuesta hace casi un mes.
El plazo previsto para tener este paquete de medidas articuladas y en marcha será de 30 días, aunque con el anuncio del nuevo esquema se espera que en pocos días se puedan retomar las exportaciones, inicialmente con un esquema mas controlado.
Según hizo trascender Producción, las exportaciones se van a abrir pero de manera gradual, pero aún no se sabe si va a ser por cupo o si determinados cortes no se van a poder exportar para reservarlos para el mercado interno. Se mantendrían restricciones para cortes considerados "populares", es decir de alta demanda, como el asado, matambre, vacío, cuadrada, falda, tapa de asado y paleta, entre otros, pero para los demás está definido que va a ser una apertura gradual. También se va a reforzar el control para evitar subfacturación y evasión fiscal en las exportaciones.
A la par del conjunto de medidas del sector cárnico, el Gobierno también viene desarrollando políticas específicas como Precios Cuidados, o del programa Súper Cerca, con más de 70 productos, que apunta a dar certidumbre, evitar la dispersión en los precios y dar previsibilidad para el resto del año.