El miércoles el INDEC dio a conocer que el 2020, con el duro impacto de la primera parte del año y las medidas restrictivas duras para contener los contagios de coronavirus, cerró con la
pobreza en un 42% y la indigencia en un 10,5%. Ante ese escenario,
ministros del Gabinete nacional salieron a describir como "crítica" a la situación, explicar en qué condiciones estaba el país ante la llegada de la pandemia y qué hay que hacer en un camino de mejora de los guarismos económicos y sociales.
En primer lugar, el ministro de Desarrollo de la Nación,
Daniel Arroyo, explicó en varias entrevistas que "sin la asistencia del Estado, hoy la pobreza sería del 51%" luego del un año de impacto del coronavirus, por lo que valoró las políticas sociales que contuvieron durante la pandemia, como la tarjeta alimentar, el IFE y el Plan Potenciar Trabajo.
"La pobreza es del 42%, sino hubiesen estado los programas sociales sería del 51%. La indigencia es del 10,5% y hubiera sido del 27,9%", advirtió el funcionario sobre los datos difundidos esta tarde por el INDEC.
No obstante, Arroyo reconoció que
"la situación es crítica" pero destacó una leve recomposición respecto al segundo trimestre del año pasado, "que llegamos a tener 47%".
"La realidad es que hoy hay más changas, hay más movimiento económico, la construcción y el textil. El que se mueve consigue una changa. El tema hoy es el precio de los alimentos y cuánto rinde la plata.
Nuestro gran desafío hoy es el precio de los alimentos, que el productor le venda directamente al consumidor y traspasar planes sociales al trabajo", agregó.
Desde su cartera en particular, el funcionario señaló que tiene "tres objetivos" para 2021: "Crear 300.000 puestos de trabajo, urbanizar 400 barrios y poner en marcha 800 jardines. La pobreza en los más chicos es el punto clave, es del 56%", detalló.
Asimismo, Arroyo señaló que "la tarea el año pasado fue sostener la situación alimentaria", mientras que "este año es dar vuelta esto". Y concluyó: "Tenemos que hacer transformaciones profundas en lo productivo, en tema viviendas y en la escolarización de los chicos. Este año tiene que ser el de la reconstrucción".
Por su parte, el titular del Ministerio de Trabajo,
Claudio Moroni, aseguró que, para revertir los niveles de pobreza en Argentina es necesario "aplicar un modelo de desarrollo que genere empleo en todo el país" tras analizar los números dados a conocer ayer por el INDEC:
"El mecanismo de salida es aplicar un modelo de desarrollo que genere empleo en todo el país, no es un método fácil ni rápido, no tiene soluciones mágicas, pero es el único posible", dijo Moroni en diálogo con la radio FM Urbana y agregó que ése es el camino en el que trabaja el Gobierno nacional.
También señaló que "la pobreza se ha convertido en un fenómeno complejo en la Argentina" y que "los métodos asistenciales sirven para situaciones como la que transita el país" en el contexto de la crisis que generó la pandemia que se suma a la que quedó de la anterior gestión de
Juntos por el Cambio, mandato durante el que la pobreza aumentó en general y particularmente en tres de sus cuatro años.
Por ese motivo, dejó claro que, mientras se trabaja en aplicar un modelo de desarrollo que genere empleo, "hay que seguir asistiendo a la gente que lo necesita, pero no son un mecanismo de salida, de solución de fondo".
Respecto a los números de pobreza e indigencia,
Moroni asumió que son "una cachetada" y que "nadie puede estar contento" con un 42% de pobreza y el 10,5· de indigencia.
Consultado acerca de los índices del desempleo durante los últimos meses, indicó que
"el año pasado cayó la generación de empleo en aproximadamente cuatro puntos" debido a la pandemia de coronavirus pero recordó que, "comparado con lo que pasó en el resto del mundo, nuestra caída del empleo fue muy baja".
"Los Estados Unidos perdieron el año pasado como 16 puntos, Brasil 14, Chile casi 10 puntos. Nosotros el empleo formal lo mantuvimos bastante bien y el empleo informal por supuesto cayó mucho más durante la pandemia", completó.
Moroni destacó que, durante el último tiempo, "el empleo se ha recuperado muchísimo" y dijo respecto al empleo formal que llevan "seis meses de crecimiento", lo que implica que "de los casi 4 puntos que traíamos, ahora tenemos 2,7".
Por su parte, el ministro de Desarrollo Productivo,
Matías Kulfas, también ponderó a las políticas de contención implementadas durante la pandemia, que "evitaron daños mayores" para la economía argentina, pero indicó que el Gobierno ahora está "en el camino del crecimiento, y el crecimiento es la base fundamental para reducir la pobreza".
En diálogo con Radio 10, Kulfas explicó que "todo forma parte de un cuadro de situación muy difícil que vive la Argentina y al mismo tiempo que muestra algunas señales positivas".
"Nos tocó empezar la gestión después de dos años de caída muy fuerte como fueron 2018 y 1019, y mientras empezábamos a ordenar la economía para volver a recuperarnos vino la pandemia y ahí uno de los momentos más duros que tuvo que vivir la Argentina en las últimas décadas, que naturalmente y lamentablemente llevó a este incremento de la pobreza", manifestó el ministro de Desarrollo Productivo.
Respecto de los indicadores que ven como positivos en cuanto a la recuperación, Kulfas precisó: "Tenemos ya ocho meses consecutivos de crecimiento del empleo de la industria, seis meses consecutivos en la construcción, es decir estos dos sectores están liderando el crecimiento y la recuperación del empleo".
También destacó que "en el sector de la Economía del Conocimiento hay cerca de 8 mil búsquedas laborales en este momento activas, es decir que efectivamente, lo que vemos es que después de un momento muy difícil que fueron los últimos dos años de (Gobierno de Mauricio) Macri más el año de pandemia, estamos creciendo y el crecimiento es la base fundamental para reducir la pobreza”
En cuanto a la inflación, el ministro Kulfas afirmó que "la expectativa que tenemos es en base a las políticas macroeconómicas más el esquema de acuerdo que hemos ido trabajando con los sectores de la producción, vamos lograr una reducción de la inflación".
Kulfas explicó que
"en la Argentina tiene el problema de la economía bimonetaria" y dijo que es un país con "algunos insumos dolarizados, porque son insumos importados y otros que se fabrican en el país, pero que al ser exportables terminan teniendo un precio referenciado al precio internacional".
"Insisto, no es un problema de este gobierno ni del anterior, es de varias décadas, es estructural y tenemos que modificarlo", remarcó. Respecto de las mesas sectoriales, sostuvo: "Tenemos un gran desafío con el sector empresario para alinear precios y revertir aumentos desmedidos. Si no hay resultados a través del diálogo hay otras herramientas".