Finalmente, después de las presiones mediáticas, los escraches a sus integrantes y los aprietes políticos a través de Juntos por el Cambio,
la Corte Suprema de Justicia de la Nación admitió el recurso de per saltum presentado por los jueces Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi y Germán Castelli, cuyos traslados a dedo vía Mauricio Macri no fuero avalados por el Senado.
A pesar de que antes del mediodía había trascendido que no lograban acuerdo, los magistrados aceptaron analizar el pedido en la reunión extraordinaria del máximo tribunal, que finalizó pasadas las 14, y después de debate y discusión le dijeron que sí a los magistrados.
El fallo -que refiere al pedido de Bruglia y Bertuzzi pero llevará a la misma situación a Castelli- lo firmaron en mayoría Ricardo Lorenzetti, Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda y Elena Highton, que hicieron el mismo voto de admitir el per saltum pero no el recurso extraordinario. En cambio, el presidente del tribunal Carlos Rosenkrantz, puso "el gancho" en disidencia, en el que sí dio lugar a la apertura del recurso excepcional.
La consecuencia del fallo es lo siguiente:
decidirán en el futuro la cuestión de fondo de los casos de Bruglia, Bertuzzi y Castelli, al haber aceptado el per saltum; prohiben momentáneamente que continúe el trámite para sus reemplazos mientras estos están de licencia.
Ahora, los supremos deben volver a reunirse en los próximos días -el plazo puede estirarse a un mes- para analizar los traslados y emitir una sentencia definitiva.
En la misma resolución se le comunicó al Consejo de la Magistratura que, hasta que se pronuncie la Corte sobre el fondo de la cuestión, debe abstenerse de llevar adelante cambios y/o designaciones de magistrados; y al mismo tiempo le dio 48 horas para enviar el expediente completo.
De esta manera, la Corte se expidió sobre la admisión del recurso, pero no sobre el fondo, porque la sentencia debe dictarse después de que conteste el Consejo de la Magistratura. Es probable que, como el máximo tribunal acortó los plazos y decretó días y horas inhábiles, la decisión sobre el fondo sea muy rápida. Mientras, los jueces permanecerán de licencia porque así lo solicitaron.
La mayoría estable en la Corte se mantiene y los magistrados que la firmaron redactaron un voto conjunto con el objetivo de evidenciar que se mantiene en el Tribunal dicha mayoría, como ocurrió en los últimos 15 años. Asimismo, esa mayoría se basó siempre en precedentes, que en esta oportunidad también se citaron, con la finalidad de dar previsibilidad en la interpretación para que las reglas sean claras.
Esa mayoría fue reunida con estrategia y lentamente, con el correr de los días, por Lorenzetti, el ex titular del cuerpo que fue apretado estos días por el macrismo y que mantiene un rol articulador que aún no logró desempeñar el actual presidente de los magistrados Rosenkrantz por lo que terminó redactando su propio voto.
Queda la incógnita de qué decidirá finalmente el cuerpo, con Lorenzetti articulando aún con Highton, Rosatti y Maqueda en uno u otro sentido político, mientras que Rosenkrantz queda en soledad sumamente pegado al macrismo.