Parece ser que hay un profundo vínculo entre los negocios ilegales que Mauricio Macri impulsó desde la Presidencia de la Nación entre 2015 y 2019 y diversos jugadores de fútbol:
es que, según investiga la Justicia, la ex estrella de la Selección argentina de fútbol Claudio Paul Caniggia se suma al actual delantero de Boca Juniors Carlos Tévez y al DT Guillermo Barros Schelotto en el escándalo de los parques eólicos que armó el ex presidente.
Anoche se conoció que el juez federal
Marcelo Martinez de Giorgi le pidió a la justicia de instrucción toda la documentación y un supuesto pendrive en el que habría datos concretos vinculados a la causa en la que se investiga el negociado del macrismo con la venta de parques eólicos.
Según publicó Ámbito Financiero,
el pendrive que habría sido aportado por Mariana Nannis, la ex mujer del "Pájaro" Caniggia, y documentación de un expediente que tramita en la justicia de instrucción caratulada “Caniggia, Claudio Paul y otros s/ defraudación por administración fraudulenta”, bajo el número 8312/2019.
En un oficio dirigido a la fiscal en lo criminal y correccional Dora Nanci Olivieri, Martinez de Giorgi le solicitó que le remita copias de toda la documentación obrante en la causa y que pudiera guardar relación con la investigación sobre los Parques Eólicos.
Antes de la pandemia,
Nannis había ido a Tribunales, donde aseguró ante la Justicia que el ex futbolista se reunía con Macri por el tema de los parques eólicos. Reveló que ella tenía detalles de cuentas y negociados que había encontrado en un pendrive.
Los investigadores también determinaron que Tevez y Barros Schelotto aportaron millonarias sumas de dinero a un fideicomiso creado para la compra de esos parques.
La justicia avanza en toda la prueba documental. Ya levantó el secreto fiscal para acceder a los movimientos patrimoniales de Gianfranco Macri, el hermano del presidente Mauricio Macri en el marco de la causa.
Se investiga un sospechoso préstamo de 5 millones de dólares que habría recibido Gianfranco Macri de una las empresas controlante de las firmas que ganaron los parques eólicos y que fueron revendidos a los pocos meses con ganancias extraordinarias, de aproximadamente 48 millones de dólares.
La causa se originó en una denuncia de los diputados Rodolfo Tailhade y Martín Doñate por supuesta defraudación, negociaciones incompatibles con la función pública y tráfico de influencias, y que después ampliaron a lavado de activos en el marco de la venta de seis parques eólicos, en Chubut y en Miramar.
Se investiga una serie de maniobras que permitieron la compra barata y posterior reventa de parques eólicos sin licitación y con ganancias, en un “pasamanos” estimadas en 48 millones de dólares para las empresas vinculadas a la exfamilia presidencial.
