19.07.2020 / Frente de Todos

“Cuando nos hicieron creer que no podíamos convivir, ganó Macri”: advertencia de Alberto para los que agitan internas

El Presidente se refirió a la convocatoria a empresarios en el acto del 9 de Julio y las posturas dentro del FdT, a partir de eso. Admitió algunos errores. No obstante, enfatizó que quien "se enoja" con su "diálogo" que "se desenoje solo" porque no va a dejar de hacerlo. "Hay gente que dentro del espacio tiene miradas propias y está bien. Eso fue el peronismo siempre", reforzó.




"No hay fuego amigo, hay gente que dentro del espacio tiene miradas propias y está bien. Eso fue el peronismo siempre. Y nosotros queremos ser más que el peronismo": así el presidente Alberto Fernández inició el principio del fin de -tal vez- su frase más elocuente para explicar cómo algunos sectores buscan provocar las peleas al interior del Frente de Todos en lugar de comentarlas -eventualmente- y por qué "los compañeros" tienen que dejar de lado esa tentación.

El mandatario explicó que "hay muchas cosas" que desde su gestión sostienen "francamente" y que "las potencian para que parezcan peleas y conflictos". Por eso, continuó, lo que se debe hacer al interior del Frente de Todos y "los compañeros" es "entender que hacen esas cosas" para provocar "caer en esas peleas y no hay que caer".

"Queremos que haya más gente, que haya independientes, gente de centro izquierda que no necesariamente sea peronista y se sienta parte de este frente de todos y todas. Entonces ¿cuál es el problema de que tengan en algún punto una disidencia? El problema es que nos hagan creer que eso hace imposible nuestra convivencia. Cuando nos convencieron de eso ganó Macri, nunca se olviden", sentenció Fernández.

Fernández anticipó en una entrevista con Página 12 que el Gobierno dará a conocer en breve "una serie de medidas que reactiven y pongan en marcha otra vez la economía", atravesada por la pandemia de coronavirus, en base a una división del país en seis regiones - AMBA, Centro, NOA, NEA, Cuyo y Patagonia - "para potenciar las fortalezas" de cada zona.

"Hay un plan general y un plan específico. Va a ser necesario hablarlo con los gobernadores de cada región", declaró el Presidente y detalló que se trata de "un conjunto de medidas" (hasta ahora suman 60), apoyadas en "incentivos" para la producción.

Dijo que "buena parte del plan es obra pública y construcción de viviendas" porque -opinó- "son formidables movilizadores de la economía" y evitan la importación de "insumos".

"Las medidas van a marcar cuál es nuestro norte. Algunos van a decir que está todo nublado, que no es fácil caminar, eso es la pandemia. Pero lo que no queremos es discutir hacia dónde vamos, porque tratan de instalar que no sabemos qué hacer y nosotros lo sabemos perfectamente. El problema es que está lleno de neblina", graficó el jefe de Estado.

Consultado sobre su vocación de diálogo y si fue "sesgada" su invitación a sectores empresarios al acto por el 9 de julio, Fernández aceptó que la convocatoria podría haber sido "un poco más amplia" y reconoció haberse "arrepentido de no haberlo convocado a Hugo Yasky, que representa otra central obrera", como así también a los "movimientos sociales".

"No puede ser que se interprete que eso implica que uno va a hacer lo que los poderes fácticos mandan. Esa es una lectura mínima, minúscula”, marcó, pero también reivindicó el hecho de que dentro del FdT conviven "miradas distintas".

Con todo, advirtió: “Sé quienes me votaron, qué intereses represento y qué país quiero. Todo este tiempo dije que tenemos que construir una sociedad más igualitaria y más equilibrada”.

"No me preocupa mucho lo que la gente cree. Respeto lo que la gente piensa. Soy muy seguro de mí mismo, que cada uno piense lo que quiera. Estoy muy seguro de lo que estoy haciendo y me siento muy acompañado por mi fuerza", subrayó.

En este marco, diferenció a los dirigentes de Cambiemos que impulsaron un comunicado poco después de que se conociera el asesinato del empresario y exfuncionario Fabián Gutiérrez de los legisladores de ese espacio opositor.

"El senador Luis Naidenoff, el diputado Cristian Ritondo hablaron de la necesidad de reconstruir la confianza para generar un diálogo más sincero. Pero para reconstruir la confianza hay cosas que no se deben hacer y decir", planteó.

"Ese comunicado fue tremendo. Insinuaba que el asesinato de una persona era producto del interés judicial de mi vicepresidenta y que yo era su encubridor. Un delirio, un disparate insoportable para la convivencia democrática. Yo estoy dispuesto a renovar la confianza pero hay cosas que pasan el límite. Fue inadmisible", insistió el Presidente.