Cuando falta una semana para el presunto final del aislamiento social, preventivo y obligatorio total en la Argentina -en principio- y persisten dudas respecto de cómo será la salida paulatina de esa cuarentena ante el avance del coronavirus,
tanto en el mundo como en el país empiezan a aparecer dudas y decisiones diversas respecto de si es recomendable o no el uso del barbijo para salir a la calle.
Por lo pronto,
en la Argentina ya hay dos provincias que actualmente obligan a sus habitantes a salir de sus hogares con barbijo o cualquier otro protector facial, otra que lo hará a partir del viernes y hasta un municipio bonaerense que se sumó a esa normativa.
Catamarca, como
contó Política Argentina y explicó su ministra de Salud,
fue la pionera en obligar al uso del "barbijo social" hace dos semanas. Se trata de uno de los tres distritos que aún no tiene casos positivos de Covid-19.
Hoy se sumó la vecina La Rioja a esa disposición local. En la ciudad bonaerense de Zárate una medida similar comenzará a regir desde mañana.
En territorio riojano, el gobernador
Ricardo Quintela firmó un decreto en el que estableció el uso obligatorio de barbijos o protectores faciales para cualquier ciudadano que circule por la calle a partir del lunes a las 00 horas.
La tercera provincia en cuestión es Jujuy: en las últimas horas, el gobernador Gerardo Morales anunció en su cuenta de Twitter que a partir del próximo viernes 10 de abril el uso del barbijo será obligatorio en la vía pública. "El incumplimiento de esta nueva medida generará una multa de mil pesos", agregó el mandatario radical.
La decisión se tomó tras una reunión con el Comité Operativo de Emergencia que se realizó en la noche del domingo, tras la cual brindaron una conferencia de prensa. “No es algo que genere protección por sí solo, esto tiene que seguir siendo acompañado por el lavado de manos y el distanciamiento social”, advirtió el titular del COE, Omar Gutiérrez.
La discusión también llegó a la Ciudad de Buenos Aires, distrito con la mayor cantidad de infectados hasta el momento y lugar donde se prevé que se producirá el pico en la Argentina, donde por ahora descartan obligar al barbijo pero sí está sobre la mesa la cuestión.
Esta mañana, el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta reiteró el pedido para que la gente se quede en su casa, pero aclaró que “si salen porque están contemplados en las excepciones, les pedimos que lo hagan tapándose la boca”.
El ministro de Salud porteño, Fernán Quiroz, complementó la cuestión. Aseguró que “los barbijos se deben conservar en los hospitales”, en referencia a los profesionales del sector sanitario, pero a la vez explicó que “a la sociedad hay que estimularla a
taparse la boca con distintos métodos para disminuir que los que están desarrollando la enfermedad puedan contagiar”.
QUÉ DICEN EL GOBIERNO NACIONAL Y LA OMS
Por el momento, la postura del gobierno nacional que encabeza
Alberto Fernández es que solo el personal de la salud y las personas infectadas utilicen los barbijos reglamentarios, en línea con las recomendaciones por ahora sostenidas por la OMS y, además, con el stock de recursos que en este aspecto no sobran en el país.
El viernes pasado la Organización Mundial de la Salud intentó llevar tranquilidad ante la confusión y la discusión a nivel mundial y sostuvo que, si bien se encuentra aún analizando el tema, no descartan que el uso de barbijos de cualquier índole sea mejor que no protegerse al salir a la calle.
No obstante, el organismo hoy se volvió a pronunciar al respecto y dejó una tajante conclusión al decir que no son una "solución milagro" en medio de la pandemia de Covid-19, pero admitió que su uso "sólo se justifica" en países donde otras medidas no puedan ser implementadas.
"No hay respuesta binaria, ni solución milagro. Las mascarillas solas no pueden frenar la pandemia de Covid-19", subrayó el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, durante una conferencia de prensa telemática desde Ginebra este lunes.