13.03.2019 / Cambiemos y el mundo

¿Macri se encamina hacia un conflicto con la ONU en el marco de su pelea contra Maduro?

La semana próxima se desarrollará la cumbre mundial de la ONU sobre la cooperación Sur-Sur en Buenos Aires, y está casi confirmado que el titular del organismo no asistirá por problemas de agenda. A través del canciller, el Gobierno hizo público su malestar, metió presión y dejó picando que el conflicto podría ser en torno al caso Venezuela. Los detalles.

por Marcelo Rielo



Las relaciones internacionales del gobierno nacional con el mundo, a pesar del intento oficial por mostrarlas como uno de los éxitos de gestión Cambiemos, no atraviesan su mejor momento. Es que Mauricio Macri podría encaminarse hacia un conflicto nada más y nada menos que con las Naciones Unidas en el marco de su pelea contra Nicolás Maduro, utilizando como excusa la posible ausencia por problemas de agenda del secretario general del organismo a una cumbre que se realizará la semana próxima en la Argentina

A siete días de la cumbre mundial de la ONU sobre la cooperación Sur-Sur que se realizará en Buenos Aires entre el próximo miércoles 20 y el viernes 22, el macrismo abrió a la opinión pública una insólita pelea diplomática contra la ONU, corporizada en su secretario general, Antonio Guterres.

¿Por qué? Guterres, quien derrotó a la excanciller argentina Susana Malcorra para conducir a la ONU tras la costosa campaña que hizo Macri con ese propósito, no confirmó hasta ahora su presencia en la Argentina para la cumbre por problemas de agenda y por el momento llegaría a Buenos Aires su segunda, la nigeriana Amina Mohammed, o la secretaria adjunta de la ONU, Rosemary Di Carlo, por lo que la administración Cambiemos está que arde.

"Esta es una conferencia de las Naciones Unidas. Argentina ha hecho esta organización porque entiende la significación que tiene la cooperación. Cada uno hace su valoración y si el secretario general no quiere estar dará sus explicaciones por las cuales (no viene)", disparó en on, increíblemente, el canciller Jorge Faurie consultado por Clarín e Infobae tras una charla en el Círculo de Legisladores de la Nación en una conferencia sobre la inserción de la Argentina en el mundo.

Como para ratificar de forma pública el enojo de Macri, Faurie incluso ventiló que habló por teléfono con el número uno de la ONU y sugirió la contradicción de que éste no participé de una reunión a la que llamó el organismo que conduce: "Hablé telefónicamente con Guterres la semana pasada y me dijo que tenía que rever sus problemas de agenda. Pero no me pudo confirmar su presencia en la cumbre de Buenos Aires tratándose de una reunión que la misma ONU convocó con la Argentina".

Según el ministro, "la Argentina fue la primera interesada en hacer la convocatoria de la ONU que propuso a nuestro país como sede. Por ello creemos que la presencia del secretario general de Naciones Unidas es lo que se merece esta cumbre".



Como para continuar la situación del insólito conflicto diplomático público, el funcionario de Macri casi sugirió que la Argentina organiza la Conferencia de Alto Nivel como un favor a la ONU: "El primer interesado en esto no es Argentina. Nosotros solamente somos el sitio donde se hace la conferencia y esto se ha preparado desde mucho tiempo atrás".

"Nosotros tenemos una conferencia de Naciones Unidas y lo que nos interesa son los resultados concretos de esta conferencia y del papel que la Argentina tiene en la cooperación. Tenemos más de 150 proyectos de cooperación en el mundo. Es una herramienta eficaz y sabemos que podemos colaborar con muchísimos países que pueden recibir nuestra asistencia en materia agropecuaria, en materia de salud, en proyectos que hemos llevado a los países del Caribe, de Asia y Africa. Entendemos que este valor no puede estar nunca en discusión. Si el secretario general no comparte estar acá ...", remató el diplomático que el Presidente eligió para representar al país ante el mundo. 

Queda claro que el Gobierno no le cree a Guterres. A pesar de lo incorrecto que parecen ser los disparos de Faurie contra el máximo organismo internacional sin razones probables, si el macrismo tuviera razón y el funcionario internacional no viniera al país por razones externas a su agenda, ¿cuáles serían los motivos por los que no quiere venir a la Argentina para liderar una cumbre que la misma ONU propicia?

Política Argentina consultó a varios especialistas y las hipótesis son varias. Más allá de que la relación entre Macri y Guterres no es buena desde el momento en que el mandatario promovió desprolijamente a lo largo del mundo a Malcorra, una chance es que, teniendo en cuenta su ideología de raíz socialista, el jefe de la ONU no quiera estar en Buenos Aires al cumplirse 40 años del Plan de Acción de Buenos Aires para Promover y Realizar la Cooperación Técnica entre los Países en Desarrollo (PABA), tratado firmado en el país entre los miembros del organismo en 1978, en plena dictadura cívico militar.

Por otro lado, una hipótesis que suena fuerte es que Guterres no quiera verse en medio de la embestida que Argentina promueve contra Venezuela con Maduro como argumento. Es que es muy posible que algunos países aprovechen para presionar en torno a la situación venezolana. La ONU reconoce la presidencia del gobierno bolivariano al igual que diversas naciones, como Rusia y China, mientras que otro importante grupo de países avalan al "presidente encargado" Juan Guaidó, como la Argentina.

Faurie no tuvo demasiado cuidado al opinar respecto de la hipótesis Venezuela y no sólo no la desmintió como para descomprimir el conflicto, sino que además ratificó que a pesar de no estar en el temario, si el tema es tocado por algún participante la Argentina avalará la cuestión.

"No sé si la situación de Venezuela es la razón por la que Guterres no confirmó su presencia en Buenos Aires y ello no nos influye. En la agenda de la conferencia no estará el tema Venezuela pero entendemos que nosotros vamos a validar esta discusión entre países si es que alguien quiere hablar de la grave situación por la que transitan los venezolanos acechados por el régimen de Maduro", disparó el jefe de la diplomacia nacional.

Si bien el secretario general de la ONU todavía tiene tiempo hasta el jueves que viene para definir su presencia o no en Buenos Aires, la cúpula del macrismo trina de bronca y deja circular el poco peso que otorgan a la posible visita de las lugartenientes de Guterres. El antecendente es que el año pasado, en medio de la cumbre del G20 que se realizó en Argentina, Macri y el portugués mantuvieron un encuentro informal, un "pull aside", lo que en diplomacia implica sólo un breve cruce. Nadie descartó allí una mala relación entre ambos líderes.

La conferencia de Alto Nivel de la ONU sobre la Cooperación Sur-Sur se realizará entre el 20 y el 22 de marzo en Buenos Aires y reunirá a presidentes y cancilleres de 193 países, con el objetivo de plantear nuevos mecanismos para hacer frente a los desafíos mundiales a través de acuerdos de intercambio de capacidades técnicas.

Habrá que esperar hasta el viernes, cuando Ana Ciuti, directora de Cooperación Internacional de la Cancillería argentina y Jorge Chediek, director de la Oficina de la ONU para la Cooperación Sur-Sur, den una conferencia de prensa para explicar los detalles de la cumbre y ver si el Ejecutivo PRO vuelve a "pinchar" a Guterres.