Alberto Wereltineck fue reelecto como gobernador de la provincia de Rio Negro, tras un
aplastante triunfo ante el candidato del Frente para la Victoria, Miguel Angel Pichetto y tras imponerse en los comicios, adelantó que sus propuestas eran puramente provinciales, pero que buscarán "establecer un vínculo y un diálogo con el Gobierno como tuvimos siempre".
"Esperemos que se dé un diálogo con el Gobierno. Río Negro es la única provincia castigada por el Gobierno nacional porque nos está cobrando la deuda. 17 provincias le deben fondos a la Nación y somos la única provincia a la que se le está descontando 28 millones por mes. Aspiramos que después de esto no se siga sucediendo eso y podamos establecer un vínculo y un diálogo como tuvimos siempre", manifestó en diálogo con el programa radial Casi Despierto.
Weretilneck resaltó que sus propuesta son puramente locales a fin de resolver los problemas de los rionegrinos y aseguró:
"Aún no tenemos ninguna definición con ningún candidato presidencial, todavía falta tiempo. Hay que ver qué sucede en las PASO".
Vale recordar que el flamante gobernador, había roto relaciones con el kirchnerismo a mediados del 2014 para sumarse al Frente Renovador de Sergio Massa, pero que abandonó el espacio hace pocas semanas.
Los dichos del gobernador, sumado a los contactos que ha tenido con Daniel Scioli durante el conflcito que aún permanece con los productores frutícolas locales, llevan a abrir el juego sobre un posible apoyo al candidato del Frente para la Victoria (FpV), en caso de que venza a Florencio Randazzo.
A pesar de tener fuertes críticas al Gobierno Nacional, su relación con el jefe ejecutivo bonaerense se remonta a la gran relación que mantenía Scioli con el fallecido gobernador Carlos Soria, padrino político del actual mandatario rionegrino.
