En las últimas horas el Papa Francisco
envió un mensaje a los argentinos en el que explicó que no visitará nuestro país en el 2017 por problemas de agenda. Sin embargo,
hace algunos meses Mauricio Macri había asegurado que el propio Francisco le había contado que viajaría a la Argentina el año que viene.
El Sumo Pontífice detalló que ya tiene "compromisis asumidos" para el 2017 y le agradeció a todos los compatriotas que le mandan mensajes: "Yo sigo siendo argentino, yo todavía viajo con pasaporte argentino", enfatizó.
Pero el Presidente en febrero, después de su primera audiencia con Francisco, sentenció: "El Papa me contó que el año que viene visitará nuestro país", a pesar de que El Vaticano siempre remarcó que la agenda del ex cardenal Jorge Bergoglio no permitiría realizar ese viaje.
Aquella audiencia de principio de año duró apenas 22 minutos y la serieda de Francisco en la foto protocolar disparó diversas especulaciones sobre su relación con Macri.
Ahora, tras la confirmación de que el Papa no viajará a Argentina en el corto plazo, vuelven a crecer las versiones sobre un supuesto malestar de Francisco con las políticas del gobierno nacional.