A pesar de que entre diciembre de 2015, cuando terminó el mandato de Cristina Fernández de Kirchner, y agosto de 2018 sólo concretaron un 6% de los anuncios de inversión,
a través de un "paper" reservado las petroleras que dominan el sector gasífero utilizaron el apoyo a los tarifazos lanzado por Mauricio Macri y la excusa de un supuesto temor al regreso del "populismo energético" para amenazar con dejar de invertir si la política o la justicia frenan el decreto que obliga a los usuarios a pagar entre 90 y $100 mensuales durante dos años para compensarlas por la devaluación.
Según reveló Infobae, las petroleras hicieron circular ayer entre empresarios, funcionarios y legisladores una fuerte advertencia que parece apoyarse en la ratificación de la medida por parte del Gobierno:
si no se ajustan las facturas de gas por la suba del dólar, habra consecuencias directas en las futuras inversiones del sector.
Desde las compañías reconocen que se verían beneficiadas por la suba impulsada por la secretaría de Energía,
Javier Iguacel, pero en cambio sostienen que sufrirían fuertes pérdidas si finalmente las denuncias judiciales o las iniciativas que ya fueron presentadas en el Congreso frenan el decreto presidencial.
El informe petrolero asegura que "sólo en el último año las inversiones en el sector hidrocarburífero llegan a USD 7.000 millones" y que "el objetivo es lograr en el mediano plazo que el país deje de importar gas".
Sin embargo, datos del propio
Ministerio de Producción y Trabajo desmienten que el sector haya invertido desde que Macri se sienta en el sillón de Rivadavia. Es que,
medido en millones de dólares, entre diciembre de 2015 y agosto de este año el sector petrolero y del gas sólo concretó un 6% de los anuncios de inversiones realizados mintras que sólo un 24% están en ejecución.
A partir de este dato,
se pude inferir que un 70% de los dólares que los empresarios prometieron que iban a poner desde que gobierna Cambiemos ni siquiera salieron de sus cuentas, ya que ese porcentaje de lo anunciado no está concretado ni en ejecución.
Volviendo a la versión de los petroleros a la que accedió Infobae, en "off the record" la argumentación de los empresarios para que no se de marcha atrás con el cobro en cuotas a causa del ajuste devaluatorio se vuelve aún más insólita:
comparan un hipotético freno a que los usuarios les paguen la devaluación con reeditar "fútbol para todos" o "la mesa de los argentinos", o lo que denominaron el regreso del concepto del "populismo energético" por el cual los consumidores no pagan el verdadero costo de la generación energética.
En el sector, YPF encabeza la producción de gas en la Argentina con el 39% del mercado, seguido de lejos por Pan American Energy, con el 15%, Total que tiene el 10%, Wintershall con el 8% y Pampa Energía, el 4%.
En línea con la otra amenaza, la de Iguacel, acerca de que sin la medida del Gobierno los aumentos serían aun mayor, las petroleras sostienen que como tienen sus contratos dolarizados para la producción de gas, así se lo cobran a las distribuidoras, que ahora quieren trasladarse ese costo al cliente.
Por eso, tras la última devaluación, justifican que las tarifas
"deberían aumentar un 181%" para cubrir los aumentos de los costos en moneda dura, es decir incluso más que el salto de la divisa. Por eso, al igual que el Ejecutivo,
prácticamente dicen que hay que agradecer a Cambiemos porque el ajuste en 24 cuotas propuesto sería muchísimo menor. "De acuerdo a nuestros cálculos, el aumento para el sector sería de 49%, la tercera parte de lo que se hubiera precisado", indicaron.
