10.08.2018 / Fin del barrionuevismo

El Partido Justicialista volvió a las manos de sus autoridades y ya trabajan para "la unidad en 2019"

José Luis Gioja recibió las llaves de la sede histórica de la Ciudad de Buenos Aires tras la intervención de Barrionuevo y aseguró que "hay que concentrar todos los esfuerzos para que el 10 de diciembre de 2019 el peronismo vuelva a poner a un presidente". Además criticó el mal estado en que dejaron el edificio ya que estaba "lleno de puchos y con la heladera vacía".




Después de cuatro meses de intervención judicial producto de una presentación parcial que solo la jueza María Romilda Servini podría hacerle lugar, la Cámara Nacional Electoral decretó su fin y el Partido Justicialista volvió a las manos de las autoridades electas por sus afiliados. 

Tras el amague de Luis Barrionuevo a atrincherarse y no entregar las llaves, oficio judicial mediante, José Luis Gioja pudo ingresar a la sede partidaria de la calle Matheu 130 junto al Comité de Acción Política para retomar las riendas del PJ y empezar a trabajar en el armado de unidad de cara a las elecciones presidenciales del próximo año.

"Tenemos que dar una vuelta de página y retomar los temas y las actividades que nos ocupaban hace cuatro meses atrás, cuando nos dictaron esta injusta intervención. Hay que concentrar todos los esfuerzos en trabajar por la unidad partidaria para que el 10 de diciembre de 2019 el peronismo vuelva a poner a un presidente", aseguró el presidente partidario.



Además denunció que Barrionuevo, Julio Barbaro y Campolongo "dejaron los ceniceros llenos de puchos, mugre por todas partes y la heladera vacía". En tal sentido acusó que también "arrancaron las placas identificatorias y bajaron los cuadros de Perón, Evita, Néstor y Cristina".