Dos meses después del masivo reclamo contra los recortes y de la toma del ministerio que conduce Lino Barañao, los científicos volvieron a la calle. Desde las 10 concentran en la sede de Palermo del Polo Tecnológico para protestar contra 19 nuevos despidos y exigir el cumplimiento del acuerdo alcanzado en diciembre, que garantizaba la reincorporación de más de 500 trabajadores.
“Venimos a reclamar porque en la primera reunión de seguimiento del acta acuerdo, la semana pasada, nos dijeron que por un supuesto ‘error de registro’ habían incluido a 19 personas y que las daban de baja. Son los primeros nuevos despedidos”, planteó Agustina Miguel, becaria doctoral y miembro de la agrupación Jóvenes Científicos Precarizados, en diálogo con
Política Argentina. La concentración, además, cuestiona el “recorte de becas doctorales y postdoctorales y exige el aumento de becas a valores de años precedentes”.
La movilización coincide con la primera reunión del año del Directorio del Conicet. Los manifestantes planeaban esperar que concluyera el encuentro para exigir una respuesta, aunque pasado el mediodía comenzaron a denunciar que las autoridades se negaban a recibirlos. En paralelo, científicos y becarios protestan por el mismo motivo en Tucumán, Mar del Plata, Corrientes, entre otros puntos del país. En la sede porteña, en tanto, una de las agrupaciones presentes ofrece “panqueques Barañao”, como original medida de protesta contra la postura del ministro de Ciencia y Tecnología.
El conflicto estalló a fin del año pasado, cuando se anunciaron recortes presupuestarios y la baja del 60 por ciento en los ingresos al Conicet por falta de fondos. En concreto, el recorte se tradujo en la reducción de cerca de 550 vacantes de investigadores.
Tras las masivas marchas y la toma de una sede del Ministerio de Ciencia durante días, los trabajadores lograron frenar la medida y se conformó una comisión de seguimiento con funcionarios y delegados de los científicos.
El compromiso apuntaba a renovar las becas de los más de 500 despedidos por un año y reubicarlos en distintas áreas del Estado dedicadas a la investigación. Pero la semana pasada salió a la luz el primer incumplimiento, cuando se conoció que daban de baja a 19 de esos científicos.
