Desde la gobernación bonaerense, mediante el Ministerio de Seguridad provincial dirigido por Cristian Ritondo, pretenden cambiar la estructura y modificar por completo la Policía Bonaerense. La reforma sería anunciada el próximo lunes e incluirá un cambio de estructura, el descabezamiento de una decena de comisarios generales y una inversión de 6 mil millones de pesos
Según informa Clarín,
desde el Ejecutivo provincial no saben con exactitud cuántos patrulleros tiene la Fuerza, los mismos comisarios a veces tienen que llamar al 911 para pedir los móviles. Además, denuncian que en la urgencia por crear las Policías Locales llevó a que se abrieran 22 escuelas de formación pero que
no tienen escuelas de tiro. También destacaron que los que ya están adentro tienen nula capacitación y controles psicológicos. Apenas el 30% de los agentes tiene chaleco antibala y casi ninguno tiene radios (handies) para comunicarse.
“Cada vez que el ministro quería darle una orden a un comisario tenía que pasar por nueve jefes distintos”, explicaron a Clarín desde el Ministerio.
“Hay un desorden estructural, organizativo y funcional”, agregaron.
Según planean desde la Provincia, el tiempo de entrenamiento de los nuevos oficiales pasará de 5 meses a 9 y se comenzará usará el programa de la Policía Metropolitana. Además, crearán una Superintendencia de Inteligencia Criminal. Finalmente, los cuerpos policiales locales quedarán bajo el mando de los intendentes a fin de año.
Además,
luego de los reiterados accidentes que hubo con patrulleros que atropellaron a vecinos, desde la cúpula planean que los conductores reciban una instrucción particular.
“Hay atraso tecnológico, equipamiento obsoleto y una infraestructura abandonada”, comentaron desde el Ministerio a Clarín, a la vez que destacaron que pretenden crear un Laboratorio Central de Pericias en Puente 12, ya que la Bonaerense no tiene.